¿Qué te motivo a estudiar en el Basque Culinary Center?
Desde que era niña, me gustó la pastelería. Siempre quise estudiar y desempeñarme como pastelera. Realicé mi formación profesional en Gastronomía en la Universidad de La Sabana en Colombia pero siempre pensaba en que quería luego especializarme en Pastelería.
Durante mi carrera, se convirtió en un sueño estudiar en el Basque Culinary Center, la verdad la oportunidad se me presentó y no dude en postularme. Me sentí muy afortunada de haber sido seleccionada para la Primera Edición del Máster de Pastelería de Restaurante y Cocina Dulce. Mi experiencia fue maravillosa, tal como la imaginé.
¿Cómo nace tu proyecto de emprendimiento BALÚ?
Este proyecto nació en compañía de mi esposo Felipe Cardozo. En ese entonces todavía estábamos estudiando Gastronomía en La Universidad. Nos propusieron crear nuestro propio restaurante en una pequeña cocina que ya existía. Así que nos arriesgamos. Desde el principio no pensábamos llegar tan lejos, pero este mes celebramos nuestro quinto aniversario.
Durante estos cinco años hemos aprendido muchas cosas, entre ellas, mi paso por el Basque Culinary Center y mi posterior práctica en el Restaurante Tïckets. Después de ello nuestro restaurante tuvo un crecimiento sorprendente. La calidad de nuestra materia prima y el concepto de comercio justo y sostenibilidad siempre ha sido nuestro sello y debo decir, que los postres también son lo que mejor nos representa.
¿Cuáles son los retos más difíciles que has tenido que afrontar a la hora de emprender?
Cuando se es emprendedor, uno de los retos más difíciles de afrontar es uno mismo. La clave es no olvidar el sueño que motivó desde el principio tu emprendimiento. Esto muchas veces no es fácil, pero hemos contado con la suerte de tener una comunidad de familia y amigos muy cercanos que nos han apoyado e impulsado a seguir adelante y a creer en nosotros mismos.
Otro de los retos más difíciles es entender qué busca el cliente. Esto muchas veces no es lo que se tiene en mente. Lo importante en este punto es lograr el equilibrio entre hacer lo que nos gusta y hacer que al cliente le guste también. Durante este proceso lo importante es ser constante y mantener la calidad.
¿Cómo llegaste a participar y ganar el concurso Bogotá Marcando Estilo?
El concurso Bogotá Marcando Estilo fué una iniciativa de la Cámara de Comercio de Bogotá aliados con el Corte Inglés. Nosotros hemos sido parte de la Cámara desde que montamos nuestro restaurante y hemos participado activamente en sus actividades que buscan fortalecer el sector de Alimentos y Bebidas.
Cuando lanzaron la convocatoria no dudamos en participar pues el objetivo del concurso se alineaba exactamente con el nuestro: Buscar el desarrollo gastronómico de la región utilizando ingredientes y sabores locales con un buen toque de creatividad. Además de promover la sostenibilidad y el comercio justo. El trabajo que desarrollamos durante el proceso de Bogotá Marcando Estilo, nos llevó a obtener el Primer Puesto.
¿Qué mensaje les darías a los actuales alumnos?
A los actuales alumnos les diría que vivan y aprovechen su paso por el Basque Culinary Center, es una de las experiencias más enriquecedoras que personalmente he vivido. Que logren conectarse con este mundo tan bonito y forjen su identidad en este mundo de los Alimentos y Bebidas. Que se enamoren y ese será su mayor éxito.