¿Cuál ha sido tu experiencia tras tu paso por el Basque Culinary Center?

Estudiar un Máster me abrió el panorama para darme cuenta de que la cocina es mucho más que estar detrás de un fogón. Es una herramienta con implicaciones sociales que afectan a todas las personas.

Al terminar el Máster también me di cuenta de que hay muchas personas como yo, que buscan utilizar la gastronomía como medio de comunicación transformador. Me abrió las puertas de lugares donde pudiera poner en valor el patrimonio gastronómico.

¿Qué te motivó a estudiar el Máster en Turismo Gastronómico?

Buscar nuevas alternativas de vida y querer ver la gastronomía desde un ángulo distinto.

¿Cómo ha sido tu trayectoria profesional? ¿Con qué tipo de empresas has trabajado?  

Trabajé en PGA Tour coordinando alimentos y bebidas en uno de los eventos deportivos más importantes. La idea principal era mostrar al mundo el valor y grandeza de la cocina mexicana a través del servicio de hospitalidades premium.

Hoy en día me dedico a hacer periodismo gastronómico de investigación, dedicado a contar historias de lugares, personas, ingredientes y tendencias. Se comunican ideas que salvaguardan el valor de la cocina.

¿Cuáles son los retos más importantes que has tenido que asumir en tu actual posición?

Sumarle valor al factor humano y social de la gastronomía. Hacer que mi audiencia empatice con el producto, el territorio, el cocinero y toda la cadena de valor que lo genera.

¿Qué consejo les darías a nuestros alumnos?

Enfocarse en la meta que quieren cumplir. Establecer un plan diario que cumpla objetivos reales para llegar a donde quieren. Es normal tener varias alternativas de metas; tener muchos talentos es un privilegio. Elegir el que los va a hacer más felices y los rete a ser mejores todos los días.